Hoy ni dietas ni dietos, tarta! Hoy dulce pero no empalagoso. Hoy manzanas. Hoy rosas. Hoy tomillo. Uoops! pronto es San Valentín. Día de los Enamorados… de lo que sea. En Retceteras lo que enamora hoy es el aroma del tomillo envolviendo a la manzana y concediendo un sitio a las rosas.
Ingredientes (para un molde de 20 ó 22 cm de diámetro)
- 1 lámina de masa quebrada (mejor si la hacemos en casa, que no cuesta nada y queda más buena!)
- 1 manzana Royal Gala (otras variedades también valdrían)
- 15o gr de mermelada de pétalos de rosa (en tiendas on line o gourmet se encuentra fácilmente)
- 1 cucharadita de agua
- unas ramitas de tomillo fresco
Si nos hemos esforzado en buscar la mermelada de rosas y las ramitas de tomillo fresco… no vamos a meternos a hacer la pasta quebrada? Pues claro que sí, que está chupao!
Abramos un paréntesis para explicar cómo hacer la masa en casa:
{♣Fórmula básica de la masa quebrada♣}
- 250 gr de harina de repostería
- 125 gr de mantequilla a temperatura ambiente
- 1 huevo
- 10 gr de azúcar
- 5 gr de sal
- 40 gr de agua hipermegafría.
En un cuenco amplio ponemos la harina, hacemos un hueco en el centro, añadimos la sal y el azúcar. Añadimos la mantequilla cortada en trozos no muy grandes colocándolos entre la harina. Incorporamos el huevo sin batir al hueco central de la harina.
Mezclamos todo lo anterior con una cuchara o con la mano. Cuando esté mezclado no amasado, vertemos el agua fría y acabamos de mezclar. Si por lo que fuera nos quedase muy pegajoso, espolvoreamos un poquillo de harina y enseguida se hará una masa que no se pega a las manos. Le damos forma de bola.
La envolvemos en papel film, aplanándola y dejándola como una torta gordeta. La llevamos a la nevera, para que la mantequilla endurezca la masa. La dejamos reposar unos 30 minutos.
Engrasamos con un poco de mantequilla un molde de base desmontable. Lo metemos en la nevera.
Sacamos la masa de la nevera, retiramos el papel film, la ponemos sobre un papel de hornear, la tapamos con otro papel y con el rodillo la estiramos hasta que quede más o menos fina (no nos quedara igual de fina que las compradas, esto es así, pero lo intentamos) y desde luego con una superficie suficiente como para poder forrar el molde.
Bien, a partir de aquí tanto para la masa comprada como la de casa, es exactamente igual.
Colocamos la masa sobre el molde, ajustamos los laterales suavemente, retiramos la masa que sobra de los bordes (aquí en plan chulito: pasando el rodillo por el borde se corta de maravilla). Con un tenedor pinchamos toda la masa, sin saña que no se trata de agujerearla, es para que no suba en el horno. La volvemos a meter en la nevera un rato, como 15 minutos par que se recupere antes de ir al horno.
Hablando del horno, lo precalentamos a 200ª calor arriba y abajo y sin aire.
Tendremos que poner algún invento para que al meter la masa en el horno tenga algo de peso y evite que suba. Aquí cada cual tiene sus métodos. El mío es poner papel de horno cubriendo la parte de la base de masa y encima un montón de garbanzos (que ya se han quedado para ese uso!)
Venga al horno! lo tenemos 12 minutos a 200º en la parte baja. Sacamos y retiramos el papel con los garbanzos. Y otra vez la metemos al horno para que se acabe de hacer y quede seca. La dejamos durante 7 minutos. Sacamos y reservamos un momento.
Preparamos el relleno rápidamente. Lavamos la manzana y la descorazonamos (aquí ponemos cara de malvados) opcionalmente podemos quitarle la piel. La cortamos en láminas finitas y reservamos.
En un cazo ponemos un tercio (50 gr) de la mermelada junto con la cucharadita de agua y lo calentamos removiendo hasta que se mezcle bien con el agua y nos quede algo líquida. Reservamos.
Esparcimos el resto de la mermelada sobre la superficie de la masa ya horneada. Colocamos encima las láminas de manzana en espiral, rociamos con la mermelada líquida del cazo. Espolvoreamos con abundantes hojitas de tomillo fresco y lo introducimos en el horno a 200º durante 20 minutos.
Dejamos enfriar un poco antes de desmoldar, más que nada para no achicharrarnos.
Y hala! a disfrutar de esta elegante tarta que nos descubre que la manzana, las rosas y el tomillo se llevan de maravilla.
Ohhhhhhhhh!!!!! Me hipermegaencanta (es que me ha hecho mucha gracia lo del agua hipermegafría, jajaja). Creo que te la voy a copiar vilmente y sin cambiar ni una coma. Me ha cautivado esa mezcla de rosas y manzana. Besitosssssss
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Coge todo lo que tu hipermegaquieras!
Petonets 😉
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Regalazo pa’ enamorarse o pa’ darse el gustazo uno solo (sobretodo si no se tiene pareja), por qué eso de San Valentín está muy bien, y muy cerca, pero sólo el olorcillo que sale del horno al cocinarla es como recibir flechas en el corazón cualquier día del año, segurísimo 😉
Besos mil
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Y mira que no soy mucho de Cupido… pero eso de las flechas aromáticas. me ha gustado!
Molts petons 😉
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Qué poético todo. Es una receta digna de Sense and Sensibility. Seguro que la comían.
Muy de acuerdo en que no hay color entre la masa hecha en casa y la comprada. Y queda igual de bien si haces el doble y congelas.
Había probado romero y manzana, pero no tomillo. Me interesa mucho la combinación….
Me falta la mermelada, la voy a comprar ahora mismo que seguro que se le puede dar más uso.
Besotes!
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Es un estilo de tarta cero empalaguina, vamos… sabor adulto! Y seguro que inventarás una delicatessen con las rosas! El tomillo en la fruta es un descubrimiento.
Molts petonets 🙂
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He encontrado ahora mismo tu blog y tengo que decirte que es un espacio encantador, me ha entusiasmado todo, asi que para no perderme ninguna entrada me hago seguidora ahora mismo!!
Te invito a dar una vuelta por mi rinconcito, espero que tambien te guste!!
Un Saludo
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Aranzazu bienvenida a retceteras. Ya he visto tu blog, de lo más variadito heartmade! y claro que me gusta.
Saludos!! 🙂
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Mmmm… qué rica se ve tu tarta!! Me han entrado unas ganas tremendas de probarla, ¿me invitas? UN 10!!! Beso guapa.
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Pilar por supuesto que estás invitada! faltaría mas!
Y gracias por la puntuación! 😉
Besos también para ti 🙂
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Es sorprendente como enamoran las hierbas en las preparaciones dulces, tanto el tomillo como el romero, y casi nunca le ponemos, menos mal que ya le estamos poniendo remedio. Qué suerte poder decir eso de hoy ni dietas, ni dietos! jijijij yo de momento me mantengo firme.
Un beso
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Admirable firmeza. Bueno pues para tí solo manzanita y tomillo ! 😉
Petonets!
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Mermelada de pétalos de rosa. Muertita me dejas. Voy a reponerme.
Ya sé donde encontrarla.
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Lo que tu no encuentres…
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Ya está, me has conquistado con la tarta y sobre todo con la mermelada de pétalos de rosa. Menuda delicia. Besos.
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Es que las rosas tienen poder!!
Petons!
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Que combinación tan perfecta y unas fotos maravillosas! Gracias por la receta ^^
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Un placer compartirla y gracias a ti por los pirópos! 😉
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Hola Marisa, lo primero decirte que me ha encantado conocerte, un gusto para mi. Me gusta mucho tu blog y esta tarta con esa combinación de sabores, además me parece original…Un beso grande y seguimos en contacto…
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Igualmente Tere. Di un paseíto por tu blog… y me entro muuuucha hambre!
Besos
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