Melón avainillado, una aproximación a Eneko Atxa

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Cada mes participo en dos retos culinarios, para mi son más un juego que otra cosa, es una manera de estar en contacto con el trabajo de otros blogueros y disfrutar o sorprenderme de la cocina que se traen entre manos. «CookingTheChef», es el que hoy nos ocupa.ctc1200

Su aliciente es permitir buscar y recrear recetas de los cocineros con reconocimiento nacional o mundial. Es estimulante, se aprende mucha técnica e inspira para redondear y mejorar recetas caseras, subiéndolas de nivel y de paso el del blog. Integrar recetas «imposibles» a una cocina doméstica es una de las virtudes de este reto.

¿Quién es Eneko Atxa? El Chef del restaurante Azurmendi, en Larrabetzu, un tres estrellas Michelin. Probablemente todos le conocéis, por si alguien no está al caso…  pincha AQUÍ  para hacerte una idea de lo estupendo que es este hombre, al que llaman el Rey de los Caldos.

Y ahora, nos bajamos de los cielos estrellados y pasamos a nuestras modestas cocinas para hacer una receta asequible de Eneko Atxa Jn.

img_9012Ingredientes ( para 4 personas)

  • 1 melón Galia, pelado y sin pepitas
  • 1 vaina de vainilla
  • 2 cucharadas soperas de azúcar
  • 1 manzana grande (sobre todo: que no sea de textura harinosa!)

img_8957Partimos el melón en trozos pequeños y lo trituramos completamente, con el brazo de la batidora o un robot de cocina, lo dejamos hecho puré!

En un cazo ponemos el azúcar, el pobre melón hecho papilla, la pulpa de la vaina de vainilla y la vaina también. Lo calentamos a fuego suave, removiendo para que el azúcar se disuelva, cuando comience a hervir  lo apagamos y tapamos. Dejamos en infusión unos 30 minutos.

Colamos y de paso retiramos la vaina. Con un embudo lo pasamos a una botella de cristal, así nos resultará más cómodo guardarlo en la nevera y perfecto para luego repartirlo en los recipientes en los que lo serviremos. O lo guardamos en donde nos vaya bien! el caso es que lo enfriemos.

Y por último, el elemento sorpresa y contraste del asunto: la manzana. La pelamos y con el utensilio de hacer bolitas, sacamos unas cuantas… todas las que podamos, que no serán muchas. Al menos 8 salen de una manzana grande. Y si no tenemos para hacer bolitas, pues cortamos pequeños cubos, pero queda más «chulo» en bolas! (iba a poner «sugerente» pero…  por Dios, es comida!).

Si queremos hacer las bolitas con antelación, podemos conservarlas sin que se oxiden con un pequeño truco: sumergirlas en un cuenco con agua en el que diluiremos un par de cucharaditas de miel. Las mantenemos durante 40 segundos y las sacamos escurridas. Las tapamos con papel film y listas para acompañar la infusión de melón y vainilla.

Cuando llegue el momento de servir, ponemos unas bolitas de manzana en el fondo del vaso y vertemos la infusión de melón por encima. Y… a sorprender!

img_9005La receta la encontré por casualidad y parece ser que está incluída en una tanda de recetas para la infancia… Reconozco que esta vez la receta está hecha «de oídas»! Y desde luego, hacerla es cosa de niños.

38 pensamientos en “Melón avainillado, una aproximación a Eneko Atxa”

  9. Marisa, sin ver la receta de Aneko, la tuya me parece de lo másssssssssss para que la hagamos los pobres mortales que no tenemos estrellas que nos iluminen el camino hacía la fama gastronómica.
    Felicidades guapa, creo que cumples el reto con Matrícula de Honor
    Bss.

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  14. Bueno cosa de niños pero me parece magnífica incluso para los adultos reacios a comer fruta, me maravilla ese toque de vainilla, también la manzana en bolas, yo creía cuando vi la foto que era melón, así que sabrosa sorpresa. Besos

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  16. Marisa que rica receta has traído!!!!!! me gusta mucho el aspecto que tiene, sobrio y los elementos que la contienen me encantan, se me hace muy sofisticada, deliciosa sin duda. Una receta que guardo, cuando vi el nombre creí que las bolitas eran de melón pero la infusión y las bolitas de manzana con su secreto para conservarlas me las llevo. Sugerente, atractiva, encantadora, sexy todo cabe en este plato que para niños y grandes viene de maravilla.
    Un beso

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