Para animar este socorrido plato, y salir de los rehogados con ajito o el aceite o la mayonesa al uso… nos liamos con los pimientos del piquíllo asados y el chorizo y la cosa cambia!
Ingredientes (para 4 personas)
- 6 patatas medianas
- 1 bolsa de judías verdes frescas de 400 gr más o menos.
- 1 trozo de chorizo de guisar (con unos 5 cm de largo es suficiente)
- 4 pimientos del piquillo asados, de lata
- 1 huevo
- 1 cucharón de aceite de oliva virgen
- sal y pimienta
Comenzamos friendo el chorizo sin piel y desmenuzado, en una sartén SIN aceite, se hace con su propia grasa. No hace falta que se haga mucho. Lo sacamos y lo escurrimos. Reservamos.
En el vaso de la batidora, ponemos los pimientos, el chorizo, el huevo, el aceite y un poco de sal y pimienta. Metemos el brazo de la batidora hasta el fondo del vaso, comenzamos a triturar sin moverlo de esa posición. Cuando veamos que está emulsionando, lo vamos levantando lentamente para que se acabe de mezclar todo, despacito vamos subiendo y bajando el brazo triturador. Reservamos en la nevera.
Pelar y lavar las patatas, trocearlas a la medida que nos guste. Las judías lavarlas y trocearlas. Ahora podemos optar por hervirlas o hacerlas al vapor… No explicaré cómo hacerlo para no ofenderos!
Ya solo queda aliñar con la mayonesa alegre y… al ataque!
¡Qué buena idea!
Con esa salsita ya ves si se alegra este plato…este ¡y cualquiera!
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Y eso que en estos tiempos el chorizo está muy denostado, pobrecico!
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