Boloñesa. Todo el mundo sabe lo que es, lo pedimos en los restaurantes para acompañar los spaghetti  o mejor aún los tallarines; lo llamamos salsa alla bolognese pero es un ragú que también nos sirve para hacer lasaña, canelones o comerlo tal cual, sin pasta o acompañado de puré de patata o polenta. La cuestión es la cantidad de tomate que le pongamos… más para salsa o menos para la lasaña. Un término medio es apto para ambas cosas.

Pues vamos con el término medio!

Ingredientes (para 2 ó 3 personas)

• 400 gr de carne de ternera picada
• (opcional para los que no pueden vivir sin cerdito en el plato, que no estoy en contra pero yo no le pongo: 1 butifarra fresca, sin piel y bien desmenuzada)
• 1 cebolla tierna, mediana, picadita
• 1 puerro, solo la parte blanca en rodajas finitas
• 1 rama de apio, sin las hojas y picada
• medio pimiento verde troceado pequeño
• 200 ml de vino blanco
• 8 cucharadas soperas de tomate natural triturado (puede ser de bote)
• una cucharilla de azúcar (o una zanahoria pequeña rallada)
• 1 pastilla de caldo vegetal
• pimienta negra recién molida
• unas ramitas de tomillo fresco
• aceite de oliva virgen extra

En una sartén amplia calentamos unas 7 cucharadas soperas de aceite, añadimos la carne picada y la butifarra si es que la ponemos. La refreímos bien a fuego vivo, que se dore, dándole vueltas (si os suelta agua, hay que dejarla hasta que esta se haya evaporado por completo). Cuando esté hecha, salpimentamos.

Añadimos las verduras, menos el tomate. Le damos vueltas para que se mezclen con la carne y lo dejamos a fuego medio, pero revolviendo para que la carne no se pegue a la sartén.

Cuando las verduras estén un poco blandas añadimos el vino blanco, subimos un momento el fuego, empezara a hervir, aflojamos el fuego y esperamos a que se evapore por completo el alcohol.

Subimos el fuego, incorporamos el tomate, le espolvoreamos el azúcar (o la zanahoria rallada),  le damos unas cuantas vueltas, echamos la pastilla de caldo vegetal, seguimos removiendo para que se deshaga la pastilla. Vertemos media tacita (de las de café) de agua, cuando hierva otra vez aflojamos el fuego al mínimo.

Le ponemos por encima el tomillo fresco (si no tenemos, le echamos una cucharadita del seco).

Lo dejamos que se vaya haciendo durante 1 hora a fuego mínimo y sin tapar. Si por lo que fuera se nos queda sin caldito, añadimos un poco (poco!) de agua.

A partir de aquí… a tomar decisiones italianas: spaghetti, tagliatelle, lasagne, cannelloni, polenta, purè di patate o semplicemente ragú alla bolognese