Qué hay para comer?

Una lubina –o lobina o lobo marino– para dos, que al final fue para uno. Por qué? Al pescado recién sacado del horno hay que hacerle los honores, estaba tan rica que era difícil esperar al que llegó tarde a comer. Probarla la probó, pero acabó friéndose un huevo… eso sí, con pimentón de la Vera.

Ingredientes (para 2 personas)

• 1 lubina (aprox. 700 grs)
• 2 tomates de rama, maduros
• 1 cebolla tierna
• 1 puerro
• 2 dientes de ajo pelado
• 1 cucharada sopera de perejil fresco y picado
• aceite de oliva virgen
• 1 cucharada rasa de pan rallado
• sal en escamas y pimienta negra

Pedimos a nuestro pescadero una lubina para dos, así nos quitamos dudas sobre el peso exacto que necesitaremos y nos dejamos de neuras. Le pedimos que le quite las vísceras. Y hala! a casa.

Pelamos la cebolla y el puerro y los partimos por la mitad. Lavamos los tomates y los cortamos en rodajas gruesas. Fileteamos los ajos.

Colocamos la lubina en una fuente apta para horno. Echamos las escamas de sal y la pimienta. Repartimos las rodajas de tomate por encima del pescado y también las salpimentamos un poco.

Vamos precalentando el horno a 180º. Calor arriba y abajo.

En una sartén calentamos aceite (medio cucharón más o menos) freímos un poco la cebolla para que se ablande, luego se terminará de hacer en el horno. Retiramos del fuego, añadimos los ajos y el perejil. Echamos todo (aceite incluido) por encima del tomate y el pescado y lo metemos inmediatamente en el horno durante 12 minutos. Sacamos la fuente y espolvoreamos el pan rallado por encima de los tomates. Volvemos a meterlo en el horno durante 3 minutos para que el pan se dore un poco.

Después del entretenimiento de quitar espinas, llega el gustazo!