De fracasar a triunfar, eso es lo que ha pasado. En un vano intento de recrear lo imposible, o sea los famosos Taps de Cadaqués, que es como intentar descifrar el secreto mejor guardado de todo L’Empordà, han surgido unos bizcochitos calados de almíbar que se deshacen en la boca y de una dulzura sorprendente. En principio me salieron una especie de bizcochitos seta… por culpa del molde casero que utilicé y que no explicaré porque hacerlos es un tostón. Pero sobraba tal cantidad de masa que opté por rellenar los clásicos moldes desechables de aluminio para flan, completados con cápsulas de papel para magdalenas. Resultado: cejas en arco! y una docena de delicias inesperadas.
Ingredientes (para unas 12 piezas) moldes de aluminio desechables para flan y cápsulas de papel para magdalenas.
- 3 huevos a temperatura ambiente
- 150 gr de fécula de patata
- 50 gr de harina de trigo, la de todo uso
- 200 gr de azúcar glas
- 4 cucharaditas de agua
- un poco de azúcar glas para espolvorear al final
para el almíbar
- 250 gr de azúcar
- medio litro de agua
- una tacita de ron (100 ml)
No, no me he olvidado de poner levadura ni impulsor químico, no llevan.
Es buena idea preparar el almíbar antes que nada, así cuando lo necesitemos estará ya frío. En un cazo ponemos el azúcar, el agua y el ron. Removemos para diluir. Lo llevamos a ebullición y entonces aflojamos un poco el fuego y esperamos a que tome la textura de jarabe no denso. Apartamos del fuego y dejamos enfriar. Si pincháis AQUÍ encontraréis info sobre el almíbar y sus texturas.
Preparamos los moldes, en cada uno ponemos una cápsula de papel . Así, ese detallito lo tenemos a punto para cuando la masa esté lista.
Y sin más preámbulos comenzamos con los huevos, separamos las yemas de las claras.
En un cuenco amplio ponemos las yemas y le añadimos el azúcar, ¡OJO! pero no todo, nos reservamos tres cucharadas soperas para luego agregarlas a las claras.
Con las varillas eléctricas mezclamos las yemas y el azúcar hasta que se esponjen, añadiendo entretanto las cucharillas de agua. Incorporamos la fécula y la harina tamizada y seguimos mezclando (consejo para no liarla parda: mezclar primero con una espátula y luego seguir con las varillas) hasta que esté la mezcla homogénea. Reservamos.
En otro cuenco grande, con las varillas eléctricas limpias, levantamos las claras a punto de nieve y mientras batimos, le vamos añadiendo en tres tandas las cucharadas de azúcar que habíamos reservado. Tienen que estar a punto de nieve firme, ese punto en que das la vuelta al cuenco y no se caen!
Ahora incorporamos la cuarta parte de claras a punto de nieve a la otra mezcla. Con una espátula mezclamos sin miedo, para unificar la masa. Añadimos otra parte de claras y con cuidado, de forma envolvente mezclamos, cuando esté añadimos el resto y con el mismo cuidado lo acabamos de mezclar.
Rellenamos las cápsulas de papel hasta casi el borde, como los moldes de aluminio son más grades y altos no habrá problema de desbordamiento cuando estén en el horno…. que por cierto habría que ir precalentando a 180º calor arriba y abajo.
Colocamos los moldes en una bandeja de horno y hala p’a dentro! El tiempo de horneado es el eterno problema, ¿cuánto rato?… pues depende del horno, 10 minutos en el mío pero en horno ajeno es un vaya usted a saber. Cuando hayan subido y la parte de arriba este dorada es el momento de pinchar con un palillo de brocheta y ver si sale limpio. Eso es que están ya.
Los sacamos, dejamos que se enfríen. Luego saldrán del molde de aluminio con mucha facilidad. También les quitamos el papel para poder calarlos con el almíbar.
Con una cuchara les echamos almíbar, sin pasarse pero sin quedarse cortos. Noooooo caer en la tentación de sumergirlos en el almíbar, que se os desharían y todo a la porra! Los colocamos en una rejilla y dejamos que se sequen un poco. Rematamos espolvoreando azúcar glas por encima.
Los podemos guardar en una caja de hojalata para conservarlos.
Con el paso de los días van perdiendo humedad y pasan a la categoría de «para mojar en el café o el chocolate»
Ainnsh! ha sido más largo explicarlo que hacerlo, pero no quería obviar detalle.
A título informativo, si hay alguien que quiera intentar realizar la receta de Taps hay una chica, «Las recetas de MJ» que ha puesto un video de cómo intentarlo y aquí veréis el porqué me salieron setas-bizcocho gracias a los moldes de elaboración McGiver caseros. Los ingredientes y cantidades que ella utiliza son diferentes a los que yo he usado.
Buenísimos!!! Me los apunto, que se ven la mar de resultones. Petonets!!!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Si te animas ya me contarás, es como dulzura a tope!
Petonets, molts!!!
Me gustaMe gusta