El rape es un pescado que parece sacado de una película de ciencia ficción, pero cuando lo tenemos limpito y listo para cocinar es una maravilla, con una sola espina central que facilita mucho la tarea a los comensales. Y muchas maneras de hacerlo, cosa que da juego. Hoy vamos por lo sencillo, aunque lucido.
Ingredientes
- 1 rape de 1 kg. más o menos
- harina
- 1 ó 2 huevos
- aceite de oliva para freir
Para el aliño
- el zumo de 1/2 limón
- sal y pimienta
- una cucharilla de vinagre
- 4 cucharadas soperas de aceite de oliva
Sólo utilizaremos los lomos del rape. La cabeza y las espinas podemos guardarlas para hacer una sopa o un fumet de pescado.
Conviene quitar esa telilla gris que envuelve los lomos. Normalmente lo limpian en la pescadería, pero hay que darle un repasito en casa. De esta forma nos evitamos que los trozos de rape se encojan.
Una vez limpios, los cortamos en láminas de 1 cm. más o menos. Y no está de más secarlos un poco con papel. Salpimentamos.
Ponemos a calentar abundante aceite. Bien caliente.
Pasamos los trozos por harina, e inmediatamente por el huevo batido. Los freimos, que se doren y los sacamos. Los dejamos sobre papel absorbente.
El aliño: mezclamos todos los ingredientes en un cuenco, y con un tenedor lo batimos para que emulsionen. Lo servimos aparte y que cada uno se ponga lo que quiera.
El rape frito está bueno solo, pero con un chorrito de este aliño, cantan los ángeles.